viernes, 4 de marzo de 2011

remesa con flora y fauna

  



                                                                   foto tomada del N.Y.T.mar.3/11  


                                                                                
   El gobierno chino ha incrementado las restricciones a los visitantes extranjeros, celoso de su estabilidad amenazada por la fiebre tumba-tiranos, y hasta cárcel les ofrece a los corresponsales de prensa que se atrevan a entrevistar a los nacionales, víctimas de la represión y la censura de ese sistema, engendro de comunismo y capitalismo descarado, corrupto hasta la hoz y el martillo. Se me quitaron otra vez las ganas de visitarte, lejana y misteriosa Catai. A comer al Toy San y a comerciar en los mayamis de la veintitrés (antigua zona rosa, muy osa).    



   Sobre de Manila
   Remesa con flora y fauna
   Rafael Mejía Arango


   Entretanto se despeja el panorama; mientras sabemos en qué vá a parar ésto; al tiempo que esperamos ansiosos el desarrollo de los acontecimientos y en medio de la expectativa y la ansiedad por conocer el final de esta historia loca que transcurre en uno de los más locos momentos de la trayectoria humana, rama ésta de los homínidos que ha sido la oveja negra, nada perita en dulce.  En esta expectante  y enervante curiosidad por saber el final de este cuento de suspenso… Hablemos pendejadas.
   Y muy en serio pidamos que se le perdone la vida al negrito Moreno gigantón, criado en su Panamá de origen a orillas de los mismos mares nuestros, posiblemente a las patadas. Y a las patadas conquistado su puesto de defensa en el equipo del Otún y del Consota. 
   
   Quién sabe a cuántos grados sobre cuarenta, en juego endemoniado en el infierno verde del poderoso de Curramba, donde, para acabar de completar, era el plumífero occiso  mítica mascota del llamado inconciente colectivo*. La rapaz ya estaba más muerta que viva y al mancito no se le ocurrió otra cosa menos inoportuna que "cuchariarla", con estilo y suavidad, fuera del campo. Lo cierto fue que al final del partido estaba más desconcertado el agresor que la misma lechuza.  
   
    Imaginemos el escenario si el búho le sacara un ojo a nuestro grone. 


   El hombrecito de vuelta a la realidad de los suyos los morochos pobres. A sus chontaduros y a sus chancacas. Adiós a los sueños de sacar, a las patadas, para adelante a su familia; de mandar las muchachas a estudiar a la ciudad; de la casita para la vieja; de la escuelita de fútbol para el retiro… adiós bolero. Y la lechuza fresca como lechuga. ¿La condenarían a la hoguera las llorosas defensoras de ociosas mascotas? ¿pedirían su cabeza los iracundos acusadores  del defensa pajaricida, culposo pero inocente, al igual que el balonazo que la noqueó?
   El joven Moreno estuvo ya purgando su desgracia en el zoo de Matecaña, a donde volverá y volverá hasta que los búhos allí cautivos lo perdonen. ¡Que los libere!, para que arreglen eso por las buenas.
 Pero lo quieren linchar los ultraecologistas (tan nocivos como sus contrarios ultradepredadores). Sin hablar de los que siempre han querido lincharlo, por moreno…

* El inconciente o el imaginario colectivo, términos ambos de “conversatorio”, como problemática y socialización, que significan en la mayoría de los casos carreta académicamente correcta. Y que de representar algo, el inconciente-imaginario-colectivo sería inconsciencia, pero de la aguda.





AVARICIA  (Del lat. avaritĭa).1. f. Afán desordenado de poseer y adquirir riquezas para atesorarlas. (dra)




   La de los bandidos que se roban los auxilios para los damnificados de la furiosa naturaleza, que se multiplican ambos, ladrones y desposeídos, en la misma proporción que los pobres y los aguaceros. Lo que no se roban en plata contante y sonante se lo roban contratistas miserables que le quitan peso a la panela, y a las puchas de arroz!!! ¿Comida lihgt? Hijos de p…


   Avaricia desbordada la de ciertos mineros grandes y pequeños, legales e ilegales, nacionales y extranjeros que por extraer sus tesoros minerales  acaban hasta con el tendido de la perra.

   Para qué más oro, diría uno. Para qué necesita  todo el coltán del amazonas un solo traqueto; uno del cual no sabíamos, dueño y señor de extensos territorios ricos en este superconductor, llamado el oro azul. Todo en poder de un personaje tan siniestro como que es  socio nada menos que del Chapo de Sinaloa. Apaguen y vámonos.
   

          CODICIA   (Del lat. *cupiditĭade cupidĭtas, -ātis). 1. f. Afán excesivo de riquezas. (dra)
   Va de la mano con la anterior, y a pesar de su tendencia a venial, es un pecadillo malsano, en cuanto que se combina muy bien, diríamos que se atraen, con la mala fe.
  No siempre. En algunos casos es sólo codicia, de buena fe pero con mucha soberbia, o ignorancia; que no le dejan ver al afectado más allá de la caja registradora, y el atesoramiento se convierte en obsesión. Ciega obsesión. También dañina.
  Razones para no entender ni compartir esa obsesión de algunos constructores manizaleños por tumbar cuanto árbol se les atraviesa en sus propósitos de comercializar hasta el último centímetro cuadrado. Y los arquitectos que diseñan aquellas mega cosas (con o), que por salvar la paga se les olvida la escencia de su oficio y se doblegan sumisos a dibujar. rafame953@gmail.com
  






1 comentario:

  1. Rafael, te he seguido desde Costa Rica, espero que te acuerdes de estos ciclistas locos que llegaron hasta tu casa.

    Te cuento que la página nuestra cuenta ya con la info y además el link de este espacio de pensamiento.

    Tambien quiero preguntarte que si te puedo eniar una pequeña entrevista ya que deseo publicar un articulo sobre la importancia de la guadua en la construcción y la experiencia vivida de parte suya en este campo tan maravilloso, el articulo saldría publicado en el periodico impreso de la universidad en que estudie ingeniería y que ahora y gracias al viaje ingrese de nuevo pero esta vez a arquitectura.

    Un fuertisimo abrazo desde esta tierra que tambien tiene olor a Café, Costa Rica.

    quedo atento atu respuesta

    me puedes responder a suramericaencleta@gmail.com o a wcalderonr@gmail.com

    un saludo de wagner y Laura

    ResponderEliminar